17 septiembre 2007

el vecino

Hay un vecino del barrio con el que no puedo evitar cruzar dos o tres palabras cada vez que voy al club. Siempre viene con cosas del estilo de éstas:

1
- No mija! Despué del clú no tome toda esa agua!! Va a engordar todito de vuelta!
(Sonrío, ni siquiera hago el mas mínimo intento de explicarle que no tiene nada que ver lo que me está diciendo)

2
- Pero! Todos los días! Tiene que hacer menos ginasia que le va a hacer mal!!

3
- Por que en vez de ir al clú no sale a correr muchacha! Es mas barato!

4
- Buenas tardes joven
-Buenas tardes ¿Como andas?
- Bien acá, cuidando al Paco - su perro- que lo tengo que ayudar a cagar que sinó me revienta el animal.
- Uy! Pobre... :S
- Si si, lo aprieto de acá ¿vistes? Y entonces le sale la caca...
Rápidamente busco la forma de irme y dejar esa para-nada-agradable conversación.

8 comentarios:

Bichicome dijo...

me quede pensando en el reflejo condicionado que habra desarrollado el perro que cada vez que le apretan la panza, larga un sorullo.

Pobre bicho.. un dia lo van a acariciar y va a dejar un "regalo" a 2 narices...

Weltklang dijo...

Me parece que tenés una puntería barbara con los vecinos. ¿porque no le mandas a Pit?

beso
W

lucía guedes de rezende dijo...

jajajaj, lo quiero conocer! llevate una foto con él al estudio, por favor!

Fio de Beque dijo...

un poco raro tu vecino, no?

Adicta a la cafeina dijo...

No! me mataste con el último comentario che, era necesario qt e diga eso?

Anónimo dijo...

que asquete!!!! lo apreta como a un tubo de pasta de dientes!!! PUAJ!!!!!

Horacio dijo...

jajajajajja, tiene que ir a la tele con ese perro!!!!!

Sancho Panza dijo...

imperdonable la actuación del señor vecino, por favor! qué necesidad de hablar de la actividad esfinterial de su can?!
ahí se ven!